Cuando el destino, bajo cualquier forma, se dirige directamente a nuestra individualidad, cuando nos llama casi por nuestro nombre, detrás de la angustia y el miedo hay siempre una especie de atracción, porque el hombre no quiere tan solo vivir, sino que tambien quiere conocer y aceptar su destino, aún cuando tenga que exponerse al peligro y la destrucción.
Sándor Márai . EL ULTIMO ENCUENTRO
TODO ERA NADA
Hace 11 horas
1 comentario:
UF, habra que pnerse a pensar en eso, cuando el destino nos llama por nuestro nombre. Me he topado varias veces con una sensación asi.
Publicar un comentario